PUNTO.- Marta Rovira / Oriol Junqueras (ER) se alian con la represión española judicial y policial, desde PSOE a VOX, contra Laura Borràs (Junts), presidenta del Parlament de Catalunya.
CONTRAPUNTOS.- Hechos y discursos muestran que este juego sucio de ER es el precio miserable que este partido paga por los indultos a determinados presos. El precio, como mínimo, consiste en hacer saltar por los aires la presunción de inocencia de las personas, incluida sobre todo la de la presidenta del Parlamento; en liquidar políticamente a Carles Puigdemont y a Junts por Catalunya; en hacer imposible un entendimiento independentista en Catalunya, España y Europa; en consolidar el régimen borbónico y su fracasado sistema autonómico.
La exiliada o quizás fugada Marta Rovira, secretaría general de ER, exige que Laura Borràs deje de ser presidenta del Parlament debido a las acusaciones sobre su gestión en la Institució de les Lletres Catalanes de que es objeto por parte de la fiscalía española. Pero Rovira, cínicamente, sigue viviendo en Ginebra, Suiza, sin presentarse a los tribunales españoles.
La postura de Rovira/Junqueras y la actual cúpula de ER sintoniza con su obsesión de cortar cabezas junteras. Han participado en la decapitación de los presidentes Artur Mas, Carles Puigdemont, Quim Torra… y han impedido que Jordi Turull presentara su candidatura presidencial.
El juego sucio de la cúpula de ER y de sus aparatos mediáticos, serviles con el régimen represor, merece que se les aplique unas palabras de Jean-Paul Sartre: «Odio a las víctimas que respetan a sus verdugos». Un cristiano puede sustituir la palabra “odio” por la más moderada de “detesto”.