El ataque furibundo de Gabriel Rufián (ER), basándose en relatos fantasiosos de las cloacas del estado, contra el president Carles Puigdemont y Junts per Catalunya, viene de lejos . Desde que Rufián se refleja en las actuaciones demagógicas y la fraseología impúdica del españolista Alejandro Lerroux (1864/1949) y se aleja del catalanista republicano Francesc Macià (1859/1933)… que en 0ctubre de 1925 viaja, ¡a las!, a Moscú.
2.- Las Juventudes de ER critican duramente a Rufián, por blanquear la ultraderecha en un chiringuito (como lo llaman los de Cs en demolición) televisiva al que invita a ultraderechistas como Tomás Guash, Arcadi Espada, Xavier Garcia-Albiol (www.larepublica.cat 20 enero 2020). Los jóvenes independentistas dicen contra el portavoz de ER en Madrid: “No podemos abrir las puertas a la normalización de los discursos de odio. El fascismo debe aislarse y combatirse. No en nuestro nombre”. Una corriente crítica del partido, Col-lectiu Primer d’Octubre, se expresa de la misma manera.
3.- El actual Gabriel Rufián, ya en aquella época, queda bien dibujado por alguien que le conoce personal y políticamente a fondo. El economista y abogado Manuel Puerto Ducet, autor de “Oligarquía económica y poder Financiero en España”, trató mucho a Rufián en “Súmate”, entidad de castellanohablantes partidarios de la independencia de Catalunya. Manuel Puerto dice: “Rufián hablaba de república, expolio español, Gramsi, Bandera Roja. La palabra independencia sólo le escuché forzado en la típica “in, inda…” al final de cada acto. Rufián es un arribista de la política. Cuando se dén cuenta de que este chico tiene tanto de indepe como Arrimadas será demasiado tarde. Fui su mentor en Súmate. Buscaba trabajo y Junqueras le ofreció un gran sueldo. Estaba en paro; yo le pagaba la cuota”.
4.- De hecho, todavía hoy, Gabriel Rufián, el de las traidoras 155 monedas de plata, cuenta con el apoyo de Oriol Junqueras y Pere Aragonès…