Salvador Illa, fracasado candidato de la Moncloa a presidir la Generalitat, hace declaraciones a uno de sus diarios amigos y bien subvencionados, “El Periódico”. La tópica cantinela de siempre: “Quiero poner el acento en lo que nos une, que es mucho. Si tengo que elegir un objetivo político que considero fundamental para Cataluña para el año 2022, no lo dudo: dialogo entre catalanes”.
2.- El comentario crítico de Antonio Baños es implacable… “Diálogo. Pero si el Parlamento quiere, por ejemplo, dialogar sobre la independencia, entonces querella e inhabilitación. Porque en España sólo se dialoga de lo que quiere la autoridad competente”.
3.- Avanguarda.cat añade: “El diálogo según Illa… Prohibir. Prohibido hablar a favor del derecho de autodeterminación y referéndum, y ser coherente en la práctica. Prohibido hablar si es para criticar la monarquía, el juancarlismo, y el engaño federal del PSOE. Prohibido denunciar el gasto presupuestario militar en tiempo de pandemia. Prohibido hablar en catalán en el Congreso y en el Senado de España donde es obligatorio hacerlo en español. Prohibido…”. El diálogo según Illa es un bluf. (“Bluf. Acción de hacer ver que algo es mucho más importante, valioso, etc., que no lo es”. Diccionario de la Llengua Catalana).