1. El Papa Francisco pide orar por los que sufren sentencia injusta. Esta petición formulada en la Semana Santa del 2020 (4 a 15 abril), es tristemente vigente en la Semana Santa del 2021 (28 de marzo / 04 de abril).
2. SENTENCIA INJUSTA. Misa matinal del Martes Santo (06 de abril 2020), ya en plena pandemia como ahora, en la capilla de la Casa Santa Marta en el Vaticano. Francisco dice en la homilía … «En estos días de Cuaresma hemos visto la persecución que sufrió Jesús y como los doctores de la Ley se ensañaron contra él. Fue juzgado con dureza, con saña, siendo inocente. Quisiera orar hoy por todas las personas que sufren una sentencia injusta a causa de ensañamiento».
2. PANDEMIA EN PRISIÓN. Misa matinal del día antes, Lunes Santo (5 de abril 2020). El Papa dice en la homilía …. «Pienso en un problema grave que existe en muchas partes de mundo. Quisiera que hoy rezaran por el problema de la superpoblación carcelaria. Donde hay hacinamiento existe el peligro, durante esta pandemia, que termine en una grave calamidad. Roguemos por los responsables, por los que han de tomar las decisiones, para que tomen un camino justo y creativo y puedan resolver el problema».
3. INTERPELACIÓN A LOS JUECES. Francisco comenta el episodio del Juicio Final. Comentario aplicable a todo el mundo, también a los magistrados del Tribunal Constitucional y del Tribunal Supremo… Explica en la homilía: «La primera pregunta que nos hará Jesús es: ‘¿Cómo te ha ido con los pobres? ¿Les has dado de comer? Cuando estaban en la cárcel, ¿los has visitado? En el hospital, ¿fuiste a verlos? ¿Ayudastes a la viuda, al huérfano? Porque yo estaba con ellos». Y por eso seremos juzgados. No seremos juzgados por el lujo o los viajes que hayamos hecho o la importancia social que hayamos tenido. Seremos juzgados por nuestra relación con los pobres. Pero si yo, hoy, ignoro los pobres , los dejo de lado, creo que no existen, el Señor me ignirará en el día del juicio. Cuando Jesús dice: ‘Porque pobres siempre los tendréis con vosotros’, quiere decir: ‘siempre estaré con vosotros en los pobres; estaré presente aquí’ . Y eso no es ser comunista, es el centro del Evangelio: seremos juzgados por ello». Sí, los jueces serán, de hecho ya son ahora, juzgados por el Dios de Jesús.