Días de muertos, incertidumbres, plegaria, esperanza … en este octubre y noviembre del coronavírico 2020. Lo escribe el científico y poeta David Jou en su carta de otoño como presidente de la Fundació Joan Maragall (cristianisme i justicía).

1. «Todos los Santos y el día de los muertos son una invitación a un momento de contemplación, de intimidad, de recuerdo, de mirada serena a la naturaleza que decae y que se prepara para el reposo invernal. Este año, sin embargo, las circunstancias agitan los espíritus y nos alejan de la serenidad anhelada. Momentos de un hundimiento económico tan grande y de tantas incertidumbres … » escribe David Jou refiriéndose a tanta gente afectada por la pandemia …». Conviene tenerlos presentes en el pensamiento, en la plegaria y en las posibilidades de ayuda que estén en nuestras manos «.
2. David Jou recuerda en este repaso de otoño a tres difuntos recientes como el obispo Pere Casaldàliga, el padre Manel, el monje e historiador Hilari Raguer. Jou comenta: «Son tres personalidades muy diferentes, tres testigos de lucha perseverante contra la injusticia o la adversidad que, sin rendirse, han encontrado en el cristianismo una energía y una esperanza que han iluminado con un sentido más profundo y expansivo su acción. En un momento en que necesitamos vigor, tenacidad y generosidad es bueno tenerlos presentes».
3. En la carta de Jou constan más temáticas como, entre otros, la encíclica Fratelli tutti del Papa Francisco, el 75 aniversario de la fundación de la Organización de las Naciones Unidas, los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU para el 2030. David Jou afirma: «Aquella Declaración, estos Objetivos, constituyen un buen elemento de conversación entre esperanzas laicas y esperanzas creyentes, que sería interesante considerar en estos tiempos tan carentes de esperanzas».