1. Juan Carlos I, rey emérito, no puede ser investigado por oscuros asuntos (Ave a la Meca, amante Corina …) debido a una decisión de los «demócratas» (?) PSOE, Podemos, PP, VOX, Cs. Argumentan que constitucionalmente es «inviolable» y «no está sujeto a responsabilidad» de manera «permanente». Este planteamiento sintoniza con los «Principios» del fascista «Movimiento Nacional» que también son «permanentes». Los «demócratas» (?) Del régimen borbónico avalan el vínculo entre franquismo y monarquía. El dictador Francisco Franco impuso como rey a Juan Carlos, padre de Felipe VI y abuelo de Eleonor y Sofía.

2. A diferencia de Franco y de los reyes de España, Jesús de Nazaret se hace siempre responsable de sus actos y es  violable. Por eso es objeto de la represión militar y de las autoridades del establishment. Él, bueno y justo, profundamente humano y abierto a Dios, y que no vive en ningún palacio, es perseguido, detenido, torturado, juzgado, condenado y crucificado.

3. Franco, además, se auto proclama «caudillo de España por la gracia de Dios» y lo hace inscribir en las monedas. ¿Es blasfema la autoproclamación de Franco? El segundo mandamiento de la ley de Dios, según el clásico Catecismo de la Iglesia católica, establece: «No tomarás en falso el nombre del Señor tu Dios (…) Prohíbe abusar del nombre de Dios (…) La blasfemia se opone directamente al segundo mandamiento (…) Es también blasfemo recurrir al nombre de Dios para justificar prácticas criminales, reducir pueblos a la servidumbre, torturar o dar muerte «.

4. El segundo mandamiento tiene  otro apartado: «No juraràs el nombre de Dios en vano». Y en la proclamación como sucesor como jefe de estado, Juan Carlos juró ante las Cortes franquistas: «Juro lealtad a su Excelencia el Jefe del estado y fidelidad a los Principios del Movimiento Nacional y demàs Leyes Fundamentales del Reino». ¿Cumple Juan Carlos este juramento? ¿Considera que aquellos ‘principios’ no son ‘permanentes’? ¿Estos «principios» forman parte del mismo arreglo que los asuntos del Ave a la Meca y Corina? «Ew perjuro quien, bajo juramento, hace una promesa que no tiene intención de cumplir o que, después de haberla prometido bajo juramento no la mantiene» (Catecismo de la Iglesia católica). Jesús ofrece una alternativa: «No jures nunca; ni por el cielo, porque es el trono de Dios, ni por la tierra, que es el estrado de sus pies, ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran rey. No jures tampoco por tu cabeza, porque no puedes volver blanco o negro un solo cabello. Di sí, cuando es sí; no cuando es no. Lo que se dice de más, viene del Maligno «(Mateo 5, 34-37).

5. Mientras, la «justicia» (?) española, el de la monarquía heredera del franquismo, ofrece un panorama desolador. Felipe González (Gal terrorista), José María Aznar (mentiras sobre las armas de destrucción masiva para justificar guerra en Irak), Juan Carlos (Ave a la Meca, Corina) … están en libertad y sin ser juzgados. A su vez los dirigentes soberanistas catalanes demócratas y pacíficos son perseguidos por poner urnas, y son exiliados y presos políticos. El president Quim Torra es perseguido por poner una pancarta reivindicando libertad. La diputada Laura Borràs es  sometida al Tribunal español que condena a los políticos catalanes por un supuesto fraccionamiento de contratos públicos que ella siempre lo niega con documentos en la mano …

6. El Dios de Jesús, realmente, no se ni el dictador Franco, ni los reyes Juan Carlos I y Felipe VI, ni Felipe González, ni José María Aznar. El Dios de Jesús se identifica con los perseguidos, los marginados, los crucificados.