El Tribunal Supremo presidido por Manuel Marchena tendría hoy a Jesús de Nazaret en prisión y lo condenaría. ¿Si o no? Pregunta legítima en una sociedad secular y, al mismo tiempo, configurada por el cristianismo y también por el nacionalcatolicismo que es la tergiversación del mensaje cristiano.
1. JESÚS CRUCIFICADO POR LA LEY. Jesús de Nazaret fue perseguido, detenido, encarcelado, torturado, crucificado por la ley establecida de su tiempo y en su pueblo. Gente y sus jefes gritaban contra Jesús: «Nosotros tenemos una ley, y según nuestra ley debe morir» (Juan 19, 7). Y Jesús, hombre bueno, fue sentenciado y condenado por los poderes imperial y quintacolumnista religioso. ¡¡¡Maldita Ley, malditos jueces!!!
2. LA JUSTICIA DE DIOS. La convicción en ámbitos cristianos es que la justicia del Dios de Jesús aplicable a los exiliados y presos políticos catalanes es humana y creadora de convivencia … que contrasta con la del TS y de Marchena. Muchos cristianos, y también agnósticos, consideran que los exiliados y presos catalanes son personas demócratas y pacíficos a pesar de que el régimen español los maltrate como peligrosos criminales violentos.
3. DIOS O MARCHENA. Entre Dios y lo que Marchena es y representa, el cristiano opta por la justicia de Dios. El cristiano asume el Salmo 46: «Dios es nuestro castillo de refugio, un defensor firme en horas de peligro. Por eso no tememos nada cuando la tierra se agita, cuando las montañas se tambalean los mares». Entre Pilatos (gobernador romano) y Caifás (presidente del Tribunal Supremo del Sanedrín) o Jesús, el cristiano opta por Jesús. El cristiano comparte las palabras del nuevo arzobispo de Tarragona, Joan Planellas, sobre la situación de los presos políticos: «El drama es que unos políticos que intentaron dar un paso en el que ellos creían y que lo hicieron pacíficamente hayan encontrado en esta situación».
4. ¿QUIERE ORAR CON NOSOTROS, JUEZ MARCHENA?. En ámbitos cristianos reza para que no haya ninguna ley que pueda encarcelar y condenar a Jesús. Se ora a favor de los exiliados, presos y perseguidos políticos … ocurra esto en Venezuela, Arabia Saudita, Corea, China, España, donde sea. Desde esta humilde www.avantguarda.cat se efectúa una propuesta. ¿Quiere orar con nosotros, juez Marchena? …
Dios de Jesús, no te vemos, ni te oimos, ni te tocamos … pero te presentimos y experimentamos dentro de nosotros, muy cerca de cada uno, entre nosotros.
Jesús, hombre bueno, que ha sufrido persecución, exilio, cárcel …
Queremos y necesitamos libertad como personas y como pueblo.
Queremos y necesitamos democracia, solidaridad, soberanía plena.
Queremos y necesitamos la liberación de los presos políticos, el regreso de los exiliados en libertad como son libres en Europa, que los perseguidos no lo sean.
Queremos y necesitamos una convivencia fraternal, pacífica, respetuosa, dialogante y esperanzada entre nosotros, en la familia, en el trabajo, en el barrio, en la comunidad eclesial, en Europa, en el mundo, entre España y Catalunya.
Este es nuestro compromiso y nuestra tarea humana, cívica, política.
En el silencio intuimos que el Dios de Jesús nos puede echar una mano.
Lo intuimos desde el fondo de nuestro corazón, de nuestra convicción, de nuestra realidad.
Lo necesitamos, lo deseamos, lo manifestamos, lo pedimos.
No esperamos ni queremos una acción divina espectacular ni mágica que rompa las leyes del universo.
Esperamos la aplicación de la ley universal del amor.
Esperamos que el Espíritu del Dios de Jesús penetre y llene nuestro espíritu.
Así seremos capaces de pedir perdón y perdonar. De partir y compartir el pan, sobre todo con los más marginados. De estar a favor de los exiliados, los presos y los perseguidos. De ser constructores de paz. De construir más democracia, más libertad, más solidaridad, más humanidad, más soberanía. Amén.