El imparcial y prestigioso Tribunal Constitucional del Reino de España prohíbe la decisión del Parlament de prohibir las corridas de toros en la Catalunya autónoma. Habrá que esperar que Catalunya sea soberana para prohibir de manera efectiva esta salvajada. Mientras, el TC considera que torturar animales es humano y constitucional. Hay que hacer notar en contra de este planteamiento españolista, sin embargo, que la tortura de los animales no es un derecho que figure en la Declaración Universal de los Derechos Humanos ni es una práctica que sea aceptada por el Catecismo de la Iglesia Católica. El prestigioso e imparcial TC, en cambio, tampoco dice nada de que las corridas de toros están prohibidas en Canarias. Pero hay gente contenta por la decisión del Constitucional. Javier García Albiol (PP) dice que la decisión del TC es una victoria sobre las opciones independentistas. Ramon Bassas, socialista crítico con el soberanismo catalán y públicamente católico, ha escrito este tuit: «Con los toros vuelve una tradición catalana documentada ya en el siglo XIV con el rey Joan y perseguida por los Borbones». El firmante de estos contrapuntos le preguntó: «¿Te imaginas al Papa Francisco asistiendo a una corrida de toros salvaje pidiendo la oreja de un toro, sea español o catalán?». El interlocutor respondió a la referencia papal con otro tuit: «Para mí, que haga lo que quiera».