1. La Unió de Josep Antoni Duran Lleida se mueve con el «seny» del Valle de los Caidos, gracias a sus nuevas relaciones tras provocar la ruptura interna de la auténtica Unió Democràtica y de la coalición CiU. ¡Qué menosprecio al democristiano catalanista Manuel Carrasco i Formiguera, ejecutado el 9 de abril de 1938 por el franquismo en Burgos, a sólo 255 kilómetros donde la tenebrosa tumba faraónica sería años después erigida por el dictador Francisco Franco!.
2. El aparato estatal español no enviará guardias civiles para registrar la sede del pequeño partido duranista que ahora tiene el objetivo de boicotear con «seny» el soberanismo catalán democrático y pacífico. Duran intensifica la relación con Mariano Rajoy y Jorge Fernández Díaz que, como él, actúan contra el soberanismo catalán. Fernández Díaz es un ultra católico -y un buen católico nunca puede ser ultra- que suele visitar el Valle de los Caídos.
3. Duran también intensifica su colaboración con Sociedad Civil Catalana (SCC), organización bien financiada vinculada a personajes y grupos franquistas como la Fundación Francisco Franco que hace peregrinaciones patrióticas nostálgicas el Valle de los Caidos. Asimismo SCC expresa su desprecio hacia Montserrat y lo que el monasterio benedictino significa en la vida eclesial y cívica de Cataluña.
4. El espíritu del Valle de los Caidos inspira la presentación de un libro de Mariano Gomà organizado por SCC. Gomà presenta el proceso soberanista como una locura colectiva basada en la soberbia y las ansias de poder. El número 2 de la candidatura de Unió por Barcelona, Martin Rodríguez Sol, asiste en nombre de Duran.
5. La buena relación entre Duran y SCC se está tramando desde antes de la ruptura de Unió Democàtica. El fundador de SCC, el ultra José Ramon Bosch, elogió en su día la plataforma Construïm impulsada por Duran y dijo que «Duran es una buena apuesta de futuro para hacer frente al soberanismo». El hecho es que organizaciones ultra españolistas utilizan como eslogan el mismo lema electoral de la Unió de Duran. El partido duranista habla de «seny«. SCC habla de «Recuperem el seny. Recuperem la senyera». Dolça Catalunya, promovida por el ala aún más dura de la ya bastante dura Sociedad Civil Catalana, habla de «Seny para para catalanes».