El abad Escarré y los derechos de Catalunya

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1. «Este homenaje al abad Escarré, en el contexto actual, no debe limitarse a recordar el pasado, sino empujar a seguir trabajando por el respeto a los derechos de las personas y de los pueblos. Y, por tanto, a continuar trabajando por los derechos de nuestro país”. Son palabras de Josep M. Soler, abad de Montserrat, en el Palau de la Generalitat.

2. El abad Soler lo decía el pasado 20 de noviembre en una sesión que formaba parte de la conmemoración del 50 aniversario de las declaraciones del abad Aureli M. Escarré a «Le Monde». ¿Por qué recordarlo ahora? Porque una delegación de la comisión organizadora ha sido recibida por el abad Soler en Montserrat. Esta delegación ha agradecido al abad y a la comunidad benedictina el apoyo logístico y espiritual dado a la celebración de este 50 aniversario con una serie de exposiciones y actividades en Catalunya hasta el último día de este año. También el abad Soler ha dado las gracias a los organizadores por la labor realizada y por el planteamiento delicado con que lo han hecho.

3. Durante la conversación del abad con sus interlocutores se trató del presente y del futuro de Montserrat, de la Iglesia, del Papa Francisco y su talante esperanzador, de Catalunya, del abad Escarré y sus circunstancias. La delegación recalcó que el objetivo de esta conmemoración ha sido y es recordar y analizar exclusivamente el hecho periodístico de las declaraciones de Escarré así como su impacto eclesial y cívico en Catalunya, España y Europa. Y explicarlo a las generaciones más jóvenes que no vivieron aquellos acontecimientos pero que son fruto de los mismos. No se ha pretendido tratar ningún otro aspecto de la figura compleja y de la obra de Escarré como abad.

4. Las declaraciones del abad Escarré se publicaron el 14 de noviembre de 1963. Los escenarios eclesial y político de 51 años después, el 9 de noviembre de 2014, mantienen elementos similares pese diferencias circunstanciales. La Iglesia católica de Juan XXIII estaba comprometida con el aggiornamento conciliar y la Iglesia de Francisco lo está con una renovación a fondo. En la Catalunya de la década de los sesenta del siglo XX había corrientes de liberación y solidaridad. En la Catalunya de las dos décadas del siglo XXI hay un proceso soberanista democrático, pacífico, gozoso y europeo.

Post publicado en www.catalunyareligio.cat

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